La Batalla de la Vuelta de Obligado (1845) permitió que las provincias del litoral continuaran siendo parte de nuestro territorio y el Paraná fuera, hasta hoy, un río interior argentino.
Siendo Juan Manuel de Rosas gobernador de Buenos Aires se produjo un conflicto internacional con los gobiernos británico y francés. Las potencias europeas, que se encontraban en plena expansión colonial, desde hacía años comerciaban en el Río de la Plata tanto con Montevideo como con Buenos Aires y eran los principales compradores de las materias primas de la región, así como los proveedores de manufacturas.
Ante una lucha interna en la Banda Oriental -hoy Uruguay- Rosas decidió intervenir con tropas para bloquear el puerto montevideano. Esta situación perjudicaba el comercio de los europeos, quienes decidieron forzar a Rosas al ingresar con sus barcos por el río Paraná rumbo a Corrientes y Paraguay.
Unos pequeños botes sostenían cadenas a lo ancho del río Paraná, en tierras de la familia Obligado. Se eligió ese lugar porque permitía una defensa más accesible, por sus barrancas y el tamaño del río en esa vuelta.
El gobierno de Rosas no permitía la libre navegación de los ríos interiores del país por parte de otras naciones, ya que esto perjudicaba los intereses comerciales del Litoral. Al ingresar la flota anglofrancesa, muy superior en número y recursos, se decidió un plan de defensa que comandó Lucio Mansilla.
Juan Manuel de Rosas y Lucio Mansilla.
Un enfrentamiento desigual
La flota anglofrancesa estaba formada por seis barcos con bandera inglesa y cinco con bandera francesa, acompañados por alrededor de 90 barcos repletos de mercancías para vender en nuestras tierras.
Croquis de la batalla.
Las fuerzas de la Confederación Argentina estaban conformadas por cuatro baterías, llamadas Restaurador Rosas, General Brown, General Mansilla y Manuelita.
Se colocaron cadenas, que cruzaban el río, junto con chalanas (pequeñas embarcaciones) llenas de diferentes materiales que fueron incendiados para que el humo despistara a las fuerzas anglofrancesas. Detrás de las chalanas se encontraban las otras embarcaciones.
Cuando los extranjeros avanzaron, Mansilla ordenó la defensa. Cerca del mediodía, informó a Rosas que habían logrado evitar que los enemigos rompieran las cadenas, pero que no faltaba mucho para que sucediera, ya que se estaban quedando sin municiones. La intensa batalla duró, aproximadamente, doce horas. Pasado ese tiempo, las tropas argentinas debieron retirarse.
¿Qué es la Soberanía Nacional?
Es el derecho que tiene un país a usar y controlar su territorio y su patrimonio sin sufrir cuestionamientos de otros países. También es el derecho a que su territorio, pueblo y gobierno sean respetados por los demás países en todas sus acciones y decisiones.
Monumento a Juan Manuel de Rosas en el Parque Natural “Vuelta de Obligado”. Fue realizado por el artista Rogelio Polesello. La obra es un semicírculo de 625 metros cuadrados de diámetro y cuatro metros de altura, formado por cadenas, acompañado por una figura de Juan Manuel de Rosas de tres metros de alto. La base tiene forma de estrella federal de ocho puntas.
Parque Histórico Natural “Vuelta de Obligado”
El Parque Histórico Natural Vuelta de Obligado, reserva natural, histórica y refugio de vida silvestre, es un área protegida histórico-natural municipal situada en la localidad de Obligado, al norte del partido de San Pedro, en el noreste de la provincia de Buenos Aires. Además de conservar la vegetación y fauna características de la región resguarda el paisaje original donde se libró la Batalla de la Vuelta de Obligado, el 20 de noviembre de 1845, en la ribera y las aguas del río Paraná, lo que la convirtió en un sitio histórico nacional.
Museo de Sitio “Batalla de Obligado”
Este museo nació con el fin de preservar valiosos objetos relacionados con el combate. Cuenta con una colección de proyectiles, herrajes y objetos metálicos que fueron acercados por los propios pobladores. El museo también ofrece una visita por la zona donde estuvieron instaladas las baterías y por el bosque donde se resguardaron las tropas.
Metralla compuesta por cinco discos de hierro atravesados en su centro por un eje que se fija en la parte superior por medio de una tuerca.
La importancia de esta batalla
A pesar de que las fuerzas anglofrancesas no fueron derrotadas, Argentina ganó diplomáticamente. Inglaterra y Francia firmaron con la Confederación Argentina un tratado por el cual reconocían su derecho sobre los ríos internos y, también, a resolver sus asuntos con otros países sin su intervención. Las potencias saludaron al pabellón nacional con veintiún cañonazos como símbolo de respeto y resarcimiento por la ofensa realizada a nuestra patria.
Las tropas anglofrancesas fueron superiores gracias a sus armas de alta tecnología para la época.
En la mayoría de los conflictos bélicos, los invasores sostienen una razón para llevarlos a cabo, que muchas veces no es el verdadero objetivo. En la Batalla de la Vuelta de Obligado los invasores sostenían que debían liberar al territorio argentino de la tiranía de Rosas que, en ese momento, estaba en el poder. En realidad, lo que les interesaba, verdaderamente, era apoderarse del río Paraná para convertirlo en una ruta de libre navegación y comercializar en su propio beneficio. Esta heroica resistencia quedó inscripta, en nuestra historia, como un símbolo de independencia, libertad y unidad nacional.
Río Paraná, en la actualidad.
El doctor José María Rosa propuso, en 1974, que la Batalla de la Vuelta de Obligado fuera reconocida como el día en que el pueblo argentino consolidó su soberanía sobre estas tierras. De este modo, el Congreso Nacional estableció, mediante la Ley Nº 20.770, al 20 de Noviembre como el Día de la Soberanía Nacional. Durante la última Dictadura (1976-1983) esta ley fue abolida hasta que, en 2010 se firmó el decreto Nº 1584 en el que se restableció la conmemoración de este importante acontecimiento.
