Llamamos digestión al proceso por el cual se captan y asimilan las sustancias nutritivas de lo que ingerimos.
LA DIGESTIÓN
Llamamos digestión al proceso por el cual se captan y asimilan las sustancias nutritivas de lo que ingerimos.
Cómo se produce la digestión
Esta se lleva a cabo en el aparato digestivo, que consta de: boca, donde se mezclan y trituran los alimentos con la saliva, facilitando su deglución por la faringe, de allí van al esófago y luego pasan al estómago.
En éste, mediante los movimientos peristálticos los alimentos son convertidos en una papilla espesa, que es digerida en forma parcial por medio de sus jugos.
Entre dichos jugos podemos citar el ácido clorhídrico, que prepara el ambiente para que los demás fermentos actúen, ya que éstos necesitan hacerlo en un medio ácido; la pepsina, que separa las proteínas en sus componentes más sencillos; los aminoácidos, y el cuajo, que sirve para coagular la leche y sólo se encuentra en los niños.
Los alimentos permanecen unas 2 horas en el estómago. Desde éste, la papilla alimenticia o quimo pasa al intestino delgado, donde gracias a los jugos intestinal y pancreático, terminan de separarse los glúcidos, lípidos y prótidos en glucosa, ácidos grasos y aminoácidos respectivamente. Finalmente se asimilan esas sustancias sencillas.
La absorción se lleva a cabo en las células del intestino delgado, que tienen grandes entrantes y salientes para aumentar la superficie de contacto de los alimentos con las células.
El paso por el intestino delgado, que se divide en duodeno, yeyuno e íleon, dura de 8 a 10 horas.
Los restos alimenticios pasan al intestino grueso, donde numerosas bacterias aprovechan los últimos residuos y se asimila el agua, quedando los sólidos para ser expulsados en la defecación.
Los alimentos permanecen en el intestino grueso de 12 a 14 horas, por lo que todo el ciclo dura unas 24 horas, desde la ingesta de los alimentos hasta su expulsión.
EL APARATO DIGESTIVO
El tubo digestivo se extiende desde la boca hasta el ano. Tiene de 10 a 12 m de longitud y está constituido por:
– La parte superior, que comprende la cavidad oral con los dientes y la boca, la lengua, las glándulas salivares, la faringe y el esófago;
– La parte inferior, conformada por el estómago, intestinos, el hígado y el páncreas.
-Dientes: órganos duros y blancos que sirven para morder, desgarrar y triturar la comida.
– Cavidad oral, boca: está ocupada por la lengua y limitada por los dientes, el paladar duro y el paladar blando, donde se inserta la campanilla. En la boca vierten sus sustancias las glándulas mandibulares, sublinguales y salivares menores.
– Lengua: está formada por varios músculos revestidos por una mucosa con papilas filiformes, fungiformes, foliáceas y circunvaladas. Las papilas se disponen en V y contienen los orgánulos del gusto.
– Glándulas salivares: las principales son las parótidas, las submandibulares y las sublinguales. Existen también las glándulas sublinguales menores, dispuestas en pequeños grupos entre las mayores.
– Faringe: conducto de 14 cm de longitud que se sitúa por delante de la columna vertebral y se prolonga con el esófago. Se divide en: rinofaringe, orofaringe y laringo-faringe. La faringe se comunica con el oído medio a través de la trompa de Eustaquio.
– Esófago: situado a continuación de la faringe, culmina en el estómago tras extenderse desde la sexta vértebra cervical a la décima torácica. Tiene unos 20 a 25 cm de longitud.
– Estómago: está situado en la cavidad abdominal, entre el esófago y el intestino y es una dilatación del tubo digestivo, con forma de saco. Se comunica con el lóbulo izquierdo del hígado, con el diafragma, con el bazo, con la glándula suprarrenal izquierda y con la cola del páncreas. Presenta también unas elevaciones entre las que se sitúan las glándulas gástricas que secretan el jugo gástrico, encargado de la transformación de los alimentos.
– Intestino: se extiende desde el píloro hasta el ano y tiene una longitud aproximada de 8 metros. Se divide en intestino delgado (duodeno, yeyuno e íleon) y el intestino grueso (ciego, colon y recto).
– Hígado: Es una glándula que ocupa el hipocondrio derecho y parte del hepigastrio y del hipocondrio izquierdo. Pesa 1,4 a 1,5 kg y tiene forma semiovoidal. La parte superior presenta dos lóbulos. La parte inferior presenta un surco en H cuya zona transversal, el hilio del hígado, sirve de entrada para la vena porta, la arteria hepática y las fibras nerviosas y para el conducto hepático y los vasos linfáticos. Se relaciona, por la derecha, con la vesícula biliar y la vena cava inferior, y por la izquierda, con la parte posterior del conducto de Arancio. El hilio del hígado se une al estómago y duodeno.
– Bilis: sustancia secretada por el hígado y que circula por unos canales que conducen al conducto hepático, del que deriva el conducto cístico que la transporta a la vesícula biliar.
– Páncreas: glándula alargada, situada sobre la pared dorsal del abdomen. Se divide en: cabeza y cola. Corresponde a las células secretoras del jugo pancreático y un componente de secreción interna formado por islotes que elaboran y vierten la insulina en la sangre.
