Debe tenerse en cuenta que los niños necesitan encontrar lugares conocidos con características constantes
Los juegos en la escuela
El cuerpo es el espacio básico de integración de las diferentes funciones y niveles del desarrollo del niño y es, a la vez, el referente privilegiado de significación de sus experiencias. Con el cuerpo, y a través de él nos expresamos y elaboramos nuestra identidad, nos relacionamos con los demás y con el entorno, manejamos objetos, ideas, etc. El alumno es entonces, es corporeidad “contenido didáctico permanente de la escuela primaria”, que se mueve y desplaza dentro de ambientes determinados, durante una importante etapa de desarrollo.
El ambiente del aula constituye una red de estructuras espaciales y de instrumentos (posibilidades o limitaciones) que colaboran en el desarrollo del niño. Según cómo organicemos ese espacio, obtendremos distintas posibilidades y situaciones de enseñanza-aprendizaje y de crecimiento personal. Luditizar el aula y el espacio exterior: patios, canchas, etc., favorece el desarrollo y cumplimiento de los objetivos que desde el punto de vista educativo se quieren lograr, dentro de un clima social y emocional adecuado. Debe tenerse en cuenta que los niños necesitan encontrar lugares conocidos con características constantes. Por lo tanto el espacio debe ser un ámbito familiar, atractivo y funcional, que les permita observar, pensar, crear y recrear. Esto los ayuda a sentirse cómodos y felices de desempeñarse en el mismo y de encontrar en él, respuestas a sus propios intereses.
Las preguntas
Número de participantes: De 4 en adelante.
Edades: De 8 a 12 años.
Duración: 5 minutos o más, a acordar.
Material: Porotos o piedritas. Cantidad a acordar.
Incentiva: Expresión oral.
Organización: Se entregará a cada jugador una cantidad determinada de porotos o piedritas. Los jugadores se interrogan entre sí; el que logra confundir al otro, le gana un poroto o piedra. Gana el equipo que junta más elementos.
Desarrollo: Se forman 2 equipos y un jurado que se encargará de computar los puntos (pueden ser 3 niños). Cada equipo puede realizar en tarjetas, distintas preguntas. Pasa un niño por cada equipo, uno pregunta y el otro responde. Se van turnando.
El juego consiste en que al que se le pregunta, debe de responder sin usar las palabras: SI, NO, PORQUE, PARA y EL. Las preguntas deben de ser ágiles a fin de confundir al jugador. El que dice una de las palabras prohibidas pierde o paga prenda.
Pares o impares
Número de participantes: De 6 a 40.
Edades: De 7 a 10 años.
Duración: 5 minutos o más, a acordar.
Material: Porotos, garbanzos, lentejas o piedritas. Cantidad a acordar.
Organización: Se entrergará a cada jugador 10 o 15 elementos. Nadie debe decir a otros cuánto recibe.
Desarrollo: Los jugadores se moverán en el salón, teniendo en una de las manos sus elementos.
Cada uno, con el puño cerrado, debe preguntar a los demás si son pares o impares los “porotos” (o elementos con que juegan). Si el jugador acierta, su contrincante deberá entregarle los porotos y, en caso contrario, el perdedor entregará los suyos. Aquel jugador que haya logrado reunir la mayor cantidad de elementos en el tiempo estipulado, será el ganador.
Lotería de escalas
Número de participantes: De 8 a 30.
Edades: De 6 a 12 años.
Incentiva: Orientación y colaboración.
Material: Dos pañuelos, lo necesario para trazar círculos en el suelo, tizas de colores y dos bastones.
Organización: Se trazan en el suelo 5 o 6 círculos de 30 cm de diámetro. En cada uno se escribe un número distinto. Ej: 10, 20, 30, 40, etc. Los círculos no estarán en línea sino agrupados en forma variada.
A diez pasos de los círculos se trazará una línea detrás de la cual se ubicarán los jugadores. Éstos se dividirán en dos equipos. Los primeros de cada equipo estarán con los ojos vendados y el bastón en la mano.
Desarrollo: A la señal, los primeros jugadores de cada equipo se dirigirán hacia los círculos. Al llegar al lugar donde presuntamente se hallan éstos, tocarán con el bastón en el suelo. Si no embocan dentro de algún círculo, pierden. Si el bastón es colocado dentro de un círculo, ganarán para su equipo tantos puntos como están indicados en el mismo. Cada equipo puede orientar a su jugador diciéndole “frío” o “caliente”.
