Ingredientes
- 4 huevos
- 120 gramos de azúcar
- 120 gramos de harina
Preparación
- Separá las yemas de las claras de los huevos. Poné las yemas en un bol pequeño y, las claras, en otro más grande.
- Agregá 60 gramos del azúcar a las yemas. Batilas en una batidora y, pasados dos minutos, obtendrás una crema blanquecina.
- Batí, también, en la batidora, las claras del huevo al “casi” punto de nieve. Cuando, comience a tomar algo de consistencia, luego de un minuto y medio del inicio del batido, agregales los otros 60 gramos de azúcar. Seguí batiendo alrededor de un minuto más hasta que se produzca el punto de nieve por completo.
- Poné las yemas en el bol donde tenías las claras y, con una cuchara, mezclá haciendo movimientos envolventes, hasta tener una masa homogénea.
- Añadí la harina. Para ello, tamizala con un colador y la añadila tal cual cae. Volvé a mezclar haciendo movimientos envolventes hasta que no haya ningún grumo.
- Forrá el fondo de un molde desmontable para tartas con papel vegetal, o papel de horno. Agregá esta masa y llevala al horno previamente calentado a 180 ºC.
- Horneá de 30 a 45 minutos. Pasada la primera media hora y, si está el bizcocho dorado, pinchalo con un palillo. Si sale seco, lo podrás retirar. Si sigue húmedo, dejalo unos minutos más.
- Cuando el cuchillo salga seco, sacá el bizcocho del horno y dejá que se enfríe 10 minutos. Desmoldalo y ponelo en una rejilla hasta que se enfríe por completo. ¡Delicioso!
¡Siempre cociná con la ayuda de un adulto!