Las causas de la desertificación que sufre el planeta son diversas. La tala indiscriminada de grandes extensiones de selva y bosque, los incendios, el mal uso del suelo y del agua, la explotación minera a cielo abierto o el pastoreo intensivo causarán, en cien años, la desaparición de las selvas tropicales y los bosques pluviales por completo. Este problema afecta a millones de personas y pone en riesgo los medios de vida de mil millones de personas en más de cien países.