BUSCAR
Síguenos en FacebookSíguenos en TwitterSíguenos en YouTubeSíguenos en Instagram

Frutos y Semillas

Comparte en FacebookComparte en TwitterEnviar por WhatsApp

Inmediatamente después de producirse la fecundación , el ovario, que encierra y protege al óvulo, se desarrolla transformándose en fruto.

EL FRUTO

Inmediatamente después de producirse la fecundación (unión del óvulo con el grano de polen constituyendo la semilla), el ovario, que encierra y protege al óvulo, se desarrolla transformándose en fruto.

Partes del fruto

La epidermis externa del carpelo (hoja modificada) se transforma en la cáscara del fruto, llamada epicarpio; la parte media o mesófilo origina el mesocarpio y la dermis interna el endocarpio. El conjunto de estas partes recibe el nombre de pericarpio. Epicarpio

Es la cáscara o pellejo del fruto. Puede presentar distintos aspectos: liso en el tomate; lustroso en la manzana; áspero en los cítricos; con pelos, como en el durazno y hasta con espinas, como es el caso de los abrojos.

Mesocarpio

Es la capa media y puede ser poco desarrollado, como en los frutos secos (poroto, arveja, abrojo, girasol, amapola, trigo), o muy desarrollado, en los que forma una pulpa (naranja, durazno, tomate, ciruela, manzana).

Endocarpio

Es la capa que está en contacto con la semilla o pepita. Ésta se origina del óvulo fecundado por el grano de polen. El endocarpio puede ser membranoso como en la pera o endurecido por la lignina (madera) y forma entonces un carozo, como en el durazno o la ciruela.

Número de semillas

Según el número de semillas, los frutos se dividen en monospermos, si contienen una semilla (durazno, ciruela, damasco), y polispermos, los que poseen varias semillas (poroto, naranja, amapola).

Dehiscencia de los  frutos

Se le llama así a la apertura natural de los frutos y ocurre cuando las semillas maduran, para dejarlas en libertad y facilitar así su dispersión.

La dehiscencia puede ser:

-longitudinal: cuando la hendidura se extiende de un extremo al otro del pericarpio (poroto).

-Transversal: cuando la hendidura es a manera de un tapa, quedando en la parte inferior una especie de urna que contiene las semillas (eucalipto).

-Poricida: cuando las semillas, muy pequeñas, se exteriorizan por diminutos poros del pericarpio (amapola).

–También existen frutos, como la naranja, el tomate, el girasol, el abrojo, que no se abren y acompañan a la semilla en su germinación. Estos frutos se llaman indehiscentes.

Frutos secos

Son los que tienen el mesocarpio poco desarrollado. Se dividen en indehiscentes, los que no se abren y dehiscentes, los que se abren.

-Los primeros son monospermos y se dividen en cariopse, como todos los de las gramíneas (maíz, trigo, avena), con la semilla íntimamente adherida al fruto; y en aquenio, como el del girasol, plátano, arce, que presentan la semilla separada del fruto.

-Los segundos, polispermos, se dividen en vaina, chaucha o legumbre que se origina de un ovario unicarpelar; y en cápsula, que proviene de un ovario pluricarpelar.

Dispersión de algunos frutos

En algunos frutos secos se observan dispositivos especiales que facilitan la dispersión, como el caso del cardo.

Frutos carnosos

Se denominan así porque tienen el mesocarpio muy desarrollado. En su gran mayoría no se abren.

Los frutos carnosos se dividen en:

– monospermos: tienen una semilla y se llaman drupas. La semilla está protegida por un endocarpio endurecido, que forma el hueso o carozo.

– polispermos: son las bayas en donde el endocarpio no está endurecido. Puede ser jugoso como el melón, la sandía, etc; o membranoso como en la pera, la manzana, etc.

Frutos múltiples

Son los que provienen de flores con gineceo formado por varios carpelos separados, como la frutilla y la mora.

Infrutescencias

Son las que proceden de flores agrupadas en inflorescencias, como el higo y la piña de los pinos y araucarias.

LA SEMILLA

Es el medio de propagación de las semillas con flores, ya que si sembramos una semilla, obtendremos un vegetal semejante al que le dio origen. Las plantas que poseen flores producen semillas.

– Color: el color de las semillas es variable:

negro, pardo, amarillento, rojo, blanco, etc.

– Forma: es diversa, en forma de riñón, esférica, oval, amorfa, gibosa, poliédrica, etc.

– Tamaño: también varía, las hay pequeñas, como las de las orquídeas; medianas, como las del poroto o el maíz; y grandes, como las de la palta y el coco.

– Cantidad: varía según la especie vegetal y está en relación con el tamaño y el modo de dispersión. Son muy numerosas en algunas especies mientras que en otras sólo se presenta una.

Partes de la semilla

Las partes de la semilla son:

– Tegumento: es una capa externa, impermeable y resistente, que protege a la semilla. Puede estar formada por una o dos membranas; en este caso la membrana externa es gruesa y se llama testa, mientras que la interna es más delgada y tenue y se llama tegmen.

– Embrión: es una pequeña plantita que se halla en el interior de la semilla. En su extremo inferior observamos la radícula, que dará origen a la raíz de la planta; en el extremo opuesto se distingue la gémula, que va a originar el tallo y las hojas y uniendo a ambas partes está el talluelo, del que se desprenden los cotiledones, encargados de la nutrición del embrión durante la germinación.

Según el número de cotiledones las plantas se dividen en monocotiledóneas y policotiledóneas.

– Albumen: es el depósito de las sustancias alimenticias que va a utilizar la semilla durante su germinación.

En algunas semillas el albumen se acumula en los cotiledones, los cuales le entregan las sustancias directamente al embrión; estas semillas se llaman exalbuminadas. En cambio en otras el albumen se deposita en un lugar distinto; estas semillas se llaman albuminadas. Según la naturaleza de las sustancias de reserva, las semillas se dividen en: amiláceas, si contienen almidón (trigo, maíz); y oleaginosas, si acumulan aceites (lino, girasol).

Dispersión de las semillas

Es el traslado de la semilla desde el fruto que la protege hasta el lugar donde va a germinar. Puede ser natural o artificial.

– Artificial: es cuando la siembra el hombre, que es el mejor diseminador.

– Natural: intervienen distintos agentes, el viento, el agua, el fruto, los insectos, las aves y los demás animales.

Si las condiciones que rodean a la semilla son favorables, cobra intensa actividad y empieza a germinar, dando origen a la nueva planta.

21 de mayo del 2017
Categoría: Enciclotin
Comparte en FacebookComparte en TwitterEnviar por WhatsApp
Seguime en Facebook

Últimos Saludos

Giovanni

Hola soy giovanni te ...ver mas

Máximo - Giovanni

Hola, somos Máximo ...ver mas

Abertinita

Hola soy abi !! Teng ...ver mas

gabi

hola amigos muchas g ...ver mas