Aunque muchas veces los gatos ronronean de puro gusto, en otras ocasiones lo hacen cuando están enfermos, asustados o de parto, para tranquilizarse. Es muy importante conocer el lenguaje corporal por el cual viene acompañado el ronroneo, desde la expresión al pestañar, la posición de su cola y de sus bigotes, ya que es una manera de expresar una emoción intensa.