La vid (vitis) es un arbusto sarmentoso y trepador, es decir, una liana. Está provista de órganos naturales que le permiten fijarse a tutores artificiales o naturales. Si no existe de dónde sostenerse, la vid se desplaza sobre el suelo. Aunque botánicamente es posible, normalmente no se reproduce por semillas sino mediante estacas obtenidas de la misma planta que, después, se transforman en barbechos (estaca con raíces). De esta forma, se asegura la reproducción de la vid con las características de la planta madre.
La vid tiene diferentes especies, pero con la que obtenemos las uvas en fresco, el jugo de uva, vino y otros usos industriales es la “Vitis vinífera”.
Asesoramiento: La vitivinicultura hace escuela, Fondo Vitivinícola Mendoza.
